Hoy hace 30 años del sainete militar del 23 de febrero de 1981, protanizado por la Benemerita al mando del teniente coronel Tejero, por suerte para nosotros no paso de una chuleria en el congreso y el paseo de los tanques por Valencia. Hechos que a los que tenemos cierta edad nos pillo en algun sitio, lugar o situacion que ha quedado grabado en la memoria a fuego como si fuese lo mas importante que nos ha pasado.
Yo en ese momento estaba en colegio en mi ultimo curso de formacion profresional, sobre las seis de la tarde vino unos de los profesores, explico lo que pasaba en Madrid .... y todos para casa sin entretenerse. Salimos escapados hacia el metro y no paramos hasta casa, al dia siguiente pegados a la radio en el trabajo donde hacia media jornada.... hasta que se soluciono todo por suerte para nosotros.
Y para recordarlo con una sonrisa una cancion que hizo el grupo "La Trinca" justo despues del paseito militar, la primera es la version en castellano y la segunda la original en catalan que es como cantaba el grupo.
Me pilló en el instituto y el miedo estaba en las calles, en los comentarios con los vecinos, en una noche eterna de radio, en una mañana incierta...
ResponderEliminarUn abrazo amigo
Me pilló en el cuerto oscuro, revelando fotos.
ResponderEliminarLas noches siguientes me crucé con una fila de tanques que se acercaban a Murcia desde Cartagena, yo iba en bicicleta y puedo jurar que eran tanques de verdad, que eran enormes y que fue ahí donde realmente más miedo pasé, pues estaba infringiendo el toque de queda. Bueno ahí y en un bar, donde un personaje de extrema derecha sacó una pistola amenazando a todos los que estábamos allí.
Lo primero que hice el día 24 fue una llamada a Suiza, para pedir que me readmitieran en mi antiguo puesto de trabajo.
Yo salía de un colegio privado del Opus Dei. Con solo 14 años, pero ya un poco peleón me enfrenté a aquellos que cataban el Cara al Sol en el autobús. Cinco kilométros festejaron lo que solo mucho más tarde fue un sainete. Cinco kilómetros con niñatos gritando vivas a Franco, José Antonio y a la Falange.
ResponderEliminarEl miedo llegó cuando me baje del autobús y, en la plaza donde me reunía con amigos de otros colegios e institutos, uno comentó que su hermano, en la mili, estaba acuartelado.
Era Badajoz, el cuartel estaba en el centro (tan en el centro que ahora es El Corte Inglés), y sí dio miedo, mucho.
Hola Senovilla, desde luego la gente tenia el miedo en el cuerpo por las consecuencias, el profesor de tecnología nuestro nos informo después de acabar todo, de conocidos suyos eliminando papeles de los partidos políticos por el "por si acaso", no fueran detrás de ellos si triunfaba el golpe, un abrazo, Kiko.
ResponderEliminarHola Zanguanga, no era una buena vista el ver paseándose a los blindados, tengo familia en Valencia y no lo pasaron bien viendo ese espectáculo en directo. Según dicen en algunos libros, la clave fue que la dimisión blindada Brunete no salio a la calle en Madrid, si llegan a pasearse otro gallo nos hubiese cantado a lo mejor, saludos, Kiko.
ResponderEliminarNo me acuerdo, supongo que en colegio
ResponderEliminarHola Luis, uno de los amigos mios que hacia la mili de "voluntario", se paso tres días acuartelado sin poder salir. Estaba a cuatro calles de su casa y a tres de la mía, dentro tenían poca información y no sabían lo que podria pasar, vamos que los "tienen por corbata" como se suele decir, saludos, kiko.
ResponderEliminarHola Oscar, ya es raro no acordarse, son de esos acontecimientos que normalmente se quedan muy bien fijados en la memoria debido a su repercusión, un abrazo, Kiko.
ResponderEliminarEn el autobús camino de la clase de informática. Gracias a un señor que llevaba una radio y no usaba auriculares, ya sabes, se la pegaban a la oreja, jejeje, pues así nos enteramos ¡y me volví a casa!
ResponderEliminarBesos
Hola La mar, suerte que en aquella época aun no iba la gente con los minicascos como ahora, y os pudisteis enterar.... aunque al nivel sonoro que los llevan igual se puede oír todo, un abrazo, Kiko.
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