- Va un campesino por la carretera casi de noche con un carro llevado por su caballo y en compañía del perro pastor...
- En eso aparece por la curva un mercedes muy rápido y los arrolla... tirando el carro hacia un barranco a pie de carretera...
- Se baja un alemán rubio y con buen porte... mira el estropicio ... y coge un revolver que lleva en la guantera...
- Baja al barranco y encuentra al perro malherido... ohh que pena... mi no poder ver sufrir animales... pobrecitos... mejor eutanasia... y le dispara...
- Baja mas abajo y encuentra al caballo con las patas rotas y sangrando... ohh... que pena... mi no poder ver al pobre caballo sufrir... mejor eutanasia... y le dispara...
- Mas abajo encuentra al campesino... un brazo roto... el ojo salido de la órbita... cortes en la cabeza... tobillo torcido...
- Y este le dice al alemán.... ¡¡¡que suerte!!!... con la caída que hemos tenido... y no me hecho nada... nada... nada...
Hola carpintero. Después de tantos años en Lanzarote ya puedes sentirte plenamente conejero. Por eso no te resultará nada descabellado el comportamiento del alemán de tu chiste. Son plenos admiradores y defensores de los animales, de hecho es frecuente que verlos crear fundaciones y albergues para perros y gatos, pero en cuanto a la extrapolar esos sentimientos a las personas... nada de nada. No digo todos, pero la mayoría resultan muy herméticos y no terminan de implicarse y convivir con las demás personas de su entorno. En fin, cada cual es como es.
ResponderEliminarUn abrazo tinerfeño y ya volveré a pasarme por aquí.
Hola CC, pues si, yo conozco alguno por aquí.... y entre que van a lo suyo y que por eso les cuesta aprender el idioma.... se relacionan lo justo, el resto lo hacen con sus paisanos que les es mas fácil, un abrazo,Kiko.
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