Esos eran los días del pan con Nocilla después del cole, de Barrio Sésamo y de jugar hasta que caía la noche. Sin duda eran los años de la inocencia y es imposible no echarlos de menos con una sonrisa de alegría y también de triste añoranza. La habitación de Van Gogh nunca estuvo tan animada. Un abrazo tinerño. Kiko, por derecho propio eres auténtica madera de tea ;) CC
A que si Arena... lo bien que lo pasabamos con esos muñecos... y a mi me siguen divirtiendo, a veces si pillo por TV. alguna peli de ellos, me quedo a mirarla, mas que cualquier otra...
que tiempos
ResponderEliminarDe cuando eramos mas inocentes y felices... luego creces y se acabo todo, debes luchar por ser algo...:))
EliminarUn abrazo...
Esos eran los días del pan con Nocilla después del cole, de Barrio Sésamo y de jugar hasta que caía la noche. Sin duda eran los años de la inocencia y es imposible no echarlos de menos con una sonrisa de alegría y también de triste añoranza.
ResponderEliminarLa habitación de Van Gogh nunca estuvo tan animada.
Un abrazo tinerño. Kiko, por derecho propio eres auténtica madera de tea ;)
CC
Hola CC, desde luego tiempos muy felices donde no nos preocupabamos de nada, solo estudiar un poco y pasarlo bien...
EliminarUn gran abrazo desde la isla de los volcanes.
¡Qué tiempo tan feliz, que nunca volverá...
EliminarUn abrazo
Hola Javier, el tiempo pasa, pero podemos encontrar otros motivos para ser felices...
EliminarUn abrazo , Kiko.
Mola que te inclinas!! jajaja
ResponderEliminarUn saludo
A que si Arena... lo bien que lo pasabamos con esos muñecos... y a mi me siguen divirtiendo, a veces si pillo por TV. alguna peli de ellos, me quedo a mirarla, mas que cualquier otra...
ResponderEliminarUn abrazo, Kiko.